martes, 15 de mayo de 2012

Dile que me siento sola sin su voz.

Y sigo pasando por aquella esquina donde, por primera vez, su mirada se juntó con la mia. Y después de joderse todo, aquí estoy. Labios rojos para darles vida y que no se note la ausencia de tus besos, pelo revuelto, ojeras por las noches en vela y suspiros de esperanza. La esperanza de que vuelvas, porque aunque me dijiste "hasta nunca", yo sigo recordando aquella promesa que me hiciste cuando, supuestamente, me querías: "Aunque algún día te diga adiós, volveré para no perderte del todo". Que ridícula, y yo me la creí, y aun espero que lo hagas.


Y pasan las horas y entre cigarro y cigarro se va consumiendo mi vida, y me dispongo a irme de esa esquina, para no parecer tan PUTA ni tan GILIPOLLAS. Espera..mis ojos. No veo. ¿Su tacto? Sí, su tacto, no puede ser. Su respiración en mi oído. La siento. Y me susurra algo al oído. "He vuelto princesa, no he podido dejar de quererte..". Me doy la vuelta, es él. Sh. Sobra silencio, faltan besos. Él tan guapo y yo tan distinta. "¿ Pero por qué me has hecho es..?". Y me calla, como solo él sabe hacer.